Cencosud: escaso interés en el shopping

Arriba: un espejismo. El estacionamiento del predio lleno, pero por la Expo Trelew. Abajo: la apertura del lugar para la exposición permitió un primer acercamiento a lo que será el centro comercial. Pocas firmas locales participarían del emprendimiento.
Fotos: Llegaron los Indios

Dieron por hecho que 60 locales serían ocupados. Y que buena parte serían negocios de la zona, a los que se les daría prioridad en el emprendimiento. Sin embargo, por lo que se pudo ver estos días, mientras el predio estuvo abierto para albergar la Expo Trelew, es que una ínfima cantidad de firmas locales se vieron seducidas por estar allí. Quonam (indumentaria deportiva), La Madrileña (zapatería) y Bianchi Bones (joyería).
El resto de las marcas que se presentaron, son las que se mueven con el holding chileno y lo acompañan en cada uno de sus emprendimientos: Yenny, Garbarino, Havanna y Optica Express.
También estarán Todo Moda, Isadora, Daniel Hetcher, Cheeky, Grisino, Mimo, Scandinavian, Koxis, Simmons, Mostaza, Kevingston y 47 Street.
Si bien es una buena noticia saber que la oferta comercial para los habitantes de Trelew se ampliará, con esas marcas apenas superan los veinte locales. Sin embargo, se supo que hay negociaciones con los gerenciadores del shopping para que el valor de los alquileres se acomode a la incierta situación actual, muy diferente a la que existía cuando el proyecto se dio a conocer.
Los locales se entregan así como se ven en la foto y son los inquilinos los encargados de vestirlos y equiparlos, por eso la inversión es muy onerosa y sólo aquellos que tienen espalda financiera podrán estar en el centro comercial.
Se supone que Portal de Trelew, que amagó con ser el elefante blanco de la ciudad, será inaugurado en marzo de 2010, cinco años después de haber comenzado su construcción.
En agosto de 2005 anunciaron con toda la pompa su ejecución y seguros, dieron por hecho que la inauguración sería durante 2006.
La realidad fue otra y les enseñó a los ejecutivos de Cencosud que la previsibilidad no es una virtud de los argentinos.
Tras el accidente en la obra, donde un obrero murió al caerse una pared, le siguió la decisión de la Justicia en prohibir por largo tiempo la continuidad de las tareas hasta que se realizaran las pericias. Después llegó la toma de la obra por parte del gremio de la construcción que duró 112 días y que finalizó, de un día para el otro, con una tardía intervención del gobierno. Nunca las autoridades explicaron por qué dejaron transcurrir tanto tiempo para intervenir, al igual que la Justicia donde ningún fiscal actuó de oficio y se quedaron, todos, de brazos cruzados.